Sumario En este debate encontramos el dilema fascinante de propiedad cultural y patrimonio nacional (Desde huesos hasta sabiduría: ¿propiedad de quién?) términos en sí mismo bajo mucha escudriña y sujetos de mucha controversia. Los ponentes vienen de Canada, Estados Unidos, y México y representan una variedad de disciplinas--arqueología, historia del arte, museografía, y antropología. Discuten como este asunto afecta sus mundos profesionales y como disputas se resuelven. Los temas son así de viejo como la antigüedad misma y han tenido la tendencia de ser ligados directamente al concepto "para el vitorioso es el botín." Ganadores ejercen el derecho a poseer, mostrar, explotar, e interpretar los objetos e ideas de los perdedores--sin hacer caso de qué si derivan de perdedores contemporaneos con los ganadores o derivan de civilizaciones o etnicidades anteriores. Debate ocurrió en la anciana Grecia y Roma como en el Tenochtitlan del siglo XIV sobre lo appropriado de preservación, exposición, y veneración de objetos tomados de estados vencidos y civilicaciones anteriores (solo tenemos que pensar en el resultado de la quema de la gran biblioteca de Alexandria). El impulso de preservar y proteger ha sido ligado intimamente con el impulso de destruir--la borradura o transformación de propiedad cultural (definido ampliamente a incluir rito); la decision de qué se debe mantener y de qué se debe destruir frecuentemente ha sido el primer orden de negocio junto con la victoria militar y/o conversión religiosa. La aparición del orden mundial poscolonial dio origen a nuevas nociones no sino de patrimonio nacional pero también de propiedad cultural. Nuevos clamadores materializaron, surgieron nuevos argumentos, nuevos regimenes se hicieron valer con autoridad. El debate que había, quedado al nivel nacional, se desarrollo aspectos subnacionales y supranacionales. Países con ricos y profundos recursos arqueológicos y artisticos como Egípto, México, Turquía, y Grecia formularom leyes definiendo y restrigiendo el uso de lo considerado patrimonio nacional. Grupos étnicos adentro de países levantaron demandas frente a su propio o otros gobiernos o museos. Emergieron coaliciones étnicas regionales supranacionales (como grupos panarcticos que incluye miembros de Estados Unidos, Canada, Greenlandia, Rusia, Suecia, Noruegos, y Finlandia). Muchos de nosotros somos concientes de estos argumentos en su forma más obvia. A quién pertenece el Acropolis? Grecia. Quién debe poseer los mármoles Elgin de Atenas (tipicamente conocidos por el nombre de su aparente dueño no por el nombre de su creador o sitio de origen)? Éste es una cuestión muy complicada. Bajo sus propias leyes de patrimonio nacional Grecia levantó su demanda en los cortes internacionales. Tibol y Matos Moctezuma discuten el estado actual y el impacto de las leyes mexicanas de patrimonio nacional. Naturalmente clamadores en ambos lados de ese debate tienen argumentos a su favor especialmente cuando la posible repatriación crea más problemas que resuelve. Por ejemplo, Monroe dice, "Hay muchos casos inclusive hoy, y estoy seguro que continuarán, en que los objetos no han sido devueltos a pesar de las peticiones de las naciones o gobiernos. En ocasiones, las devoluciones casi garantizarían que algún burocrata de alguna nación, pasando por una división cultural, se beneficiará. En otras, no es claro qué pasaría con los materiales, o quién tiene el verdadero derecho de posesión. Así que, por un lado, hay toda una variedad de asuntos difíciles que resolver, y por el otro, la necesidad de estnádares más estrictos, y sea en el caso de arte robado por los nazis o en la excavación ilegal de sitios arqueológicos. La mayoria de las veces, las cosas se obtienen de manera ilegal, no hay información sobre recolección, los objetos son simplemente sacados de su ubicación original para ponerlos al valor del mercado. Los museos simplemente no pueden seguir acosados por estos procesos." Que pasa cuando entramos en áreas nuevas y desconocidas como representaciones de ritos fotografiadas, filmadas, o grabadas que un grupo o otro se considera sagrada o secreta? Qué de la identificación y explotación, por ejemplo, de plantas usadas por razones medico-religiosas? Como se figuran en esa ecuasión los restos mortales humanos--especialmente si análisis genética determina que no hay gentes directamente relatadas viviendo cerca del sitio de descubrimiento? O la material genética su misma? Importa si los objetos fueron dados en vez de tomados (por ejemplo, el caso del "penacho" de Moctezuma en Viena), o si hay prueba de que el objeto es otro de que se pretende pero, sin embargo, es considerado auténtico por la gente actual del país de origen del objeto (otra vez, el mismo "penacho")? Brown, Monroe, y Feest discuten estos y otros nuevos asuntos que han empezado a aparecer con una cierta frecuencia. Según nuestros ponentes, ya no vivimos en un mundo donde "posesión es 9/10 de la ley." Hay que tomar en cuenta largura de posesión, circunstancias de adquisición, los futuros beneficios de explotación del objeto, y el significado del objeto a gentes del sitio de origen del objeto. Finalmente, cuál es el impacto de tecnología, globalización, y convenios internacionales en la identificación y recuperación de objetos robados, mal colocados, y mal identificados? Schmitt menciona las categorías de protocolos y estándares que se están desarrollando corrientemente para dar apoyo a las policías, museos, países, y a los grupos étnicos mismos en rastrear objetos mismo en tiempo como en espacio. Como dice Schmitt, "información sobre un objeto robado tiene que viajar más rapidamente que el objeto mismo," pero a la vez la información tiene que viajar con discreción. Como comenta Brown, por razones de seguridad, sensibilidad cultural, investigación, académica y la política las autoridades llegan a ser "guardias de la puerta" de información como de objetos. La cantidad y el tipo de los "intersados" (personas que tienen interés en el resultado de un proceso) han cambiado. La cantidad y el tipo de "cosas" que están en la mesa para discutir han cambiado--y ya el término "propiedad cultural" puede incluir cosas intangibles como rito o "usos y costumbres," ideas y oraciones.